Según explican, el hidrógeno y el oxígeno se combinan en una pila de combustible pequeña, un esfuerzo que lejos de parecer una utopía afirman que ya es posible y que lo lograron con éxito. ¿Cómo? La clave es que, a diferencia de las pilas de litio actuales, la carga no es con electricidad, sino a través de una célula (o pila) de combustible delgada que utiliza hidrógeno como combustible.
Así, el prototipo de iPhone es prácticamente igual al que vemos hoy, sin modificación aparente, ya que la célula de combustible es del mismo tamaño que el chasis del iPhone 6, pero a la vez tan delgada que puede caber al lado de la batería convencional sin alteración alguna. La única diferencia es una pequeña hilera de orificios de ventilación traseras que permite el escape de vapor de agua en pequeñas cantidades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario