Un grupo de investigadores de la Universidad de California en Irvine (EEUU) inventaron una batería de nanocables que puede ser recargada más de 200.000 veces que una batería de litio como las que se usan en los dispositivos electrónicos. Las mismas suelen estropearse (e incluso explotar) después de 7.000 ciclos de carga, como mucho, ya que se expanden con el uso creando grietas e inutilizándolas.
Una batería que soporte ser recargada 200.000 veces, significaría el fin de las baterías obsolescentes. Este descubrimiento nos acercaría a no tener que sustituirlas jamás.
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