La exigencia tecnológica de los niños, combinada con padres que cada vez son más consentidores, ha hecho que cada día sean más los menores de 13 que cuentan con acceso a un teléfono inteligente, ya sea propio o prestado por sus padres para poder chatear, jugar, ver videos y tener contacto con sus amigos cada vez más tecnologizados.
No deja de sorprender cómo los más pequeños utilizan los dispositivos móviles con una facilidad tan abrumadora, como si hubieran nacido sabiendo cómo hacerlo desde el primer momento.
Pese a esto, es importante que los niños estén protegidos de cierto contenido no recomendado para su edad. Incluso es necesario protegerlos de las descargas que pueden realizar.
Para ello, hay diversas aplicaciones (app) que ayudan a reforzar el control parental. A continuación algunas de ellas sugeridos por Xataka.
Kid’s Shell. Es una herramienta muy básica, pero con la que se puede controlar con facilidad a qué aplicaciones pueden acceder los niños. Se basa en la creación de un menú principal para ellos, del que no pueden salir y en el que uno puede dejarles las apps que uno quiere que usen.
Qustodio. Permite no sólo controlar el acceso a las aplicaciones de los menores, sino también ajustar límites de uso diario y monitorizar por completo todo lo que se hace desde el teléfono. Quizás una aplicación un tanto restrictiva, pero muy eficaz en el control del uso de redes sociales.
Norton Family. La versión del clásico antivirus en app de control parental para dispositivos móviles. Es una de las más utilizadas. Esta app permite hacer un seguimiento del histórico de visitas, aviso de descargas y monitorización de redes sociales. Además, se puede consultar qué se hace en el dispositivo desde otro terminal, por lo que se puede saber en todo momento qué se está haciendo desde él.
Kaspersky SafeKids. Es una herramienta de control parental muy completa que no sólo permite gestionar los accesos en el móvil, sino también conocer la ubicación de los niños en todo momento gracias a su función de geolocalizador.
Dinner Time. Con esta app se puede bloquear el uso de un dispositivo desde otro. Si, por ejemplo, queremos que los niños no puedan utilizar el teléfono durante la hora de comer o cuando tienen que estudiar, basta con pulsar desde nuestro teléfono el botón "Take a Break" para que éste se bloquee.
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