Vaso para smartphone

Hay pocas cosas tan paradójicas como los smartphones: aparatos diseñados para que nos relacionemos con los demás terminan siendo una especie de agujero negro que se traga toda nuestra atención y que impide que hablemos con las otras personas. La gente no para de mirar sus pantallas y pasar olímpicamente de lo que tenga alrededor, ya sean familiares, parejas amigos o hijos.

Para poner remedio a tan desolador panorama, un bar de Brasil ha creado un invento fantástico: un vaso de cerveza que solo se sujeta si en la base se coloca un móvil de última generación.

Quienes quieran beber en el Salve Jorge de Sao Paulo tendrán que dejar sus iPhone en la mesa y degradarlos a simples posavasos. Así se evita la tentación de mirar la dichosa pantallita y obliga a concentrarse en la conversación y en pasar un buen rato, justo lo que hacíamos todos antes de que Steve Jobs se sacara de la manga su famoso cacharro.

El recipiente se llama “Offline Glass” (vaso desconectado) y es una creación de la agencia publicitaria Fischer & Friends para el este bar brasileño. Para su diseño, tan solo han tenido que recortar el fondo -vamos, el culo- de un vaso de pinta.

Aunque la iniciativa es loable, vemos un gran error: las gotas de condensación que caen por el Offline Glass terminan sin remedio en el teléfono, por lo que es muy probable que el móvil se estropee.