87 por ciento de un grupo de personas entrevistadas dentro el radio urbano de Cochabamba no sólo usa su celular para ejecutar acciones comunes (llamadas o mensajes), sino que también lo emplea para conectarse a internet, según refiere un estudio realizado por la Universidad Privada Boliviana (UPB).
Con la intención de develar la cuestionante “¿Cuáles son los usos que los cochabambinos le dan a su dispositivo móvil”, 18 estudiantes de un Diplomado de Marketing Digital de la UPB, dirigidos por el docente Marcelo Durán, encuestaron a 250 ciudadanos de entre 18 y 55 años de edad.
Tras realizar el tratamiento respectivo de los datos pertenecientes a la primera cuestionante que guió la encuesta -la misma estaba referida a los servicios que son más aceptados por la población-, el equipo de investigadores evidenció que la cifra de personas que usa su dispostivo móvil para conectarse a internet y las redes sociales es elevada, 76 por ciento .
Por otro lado, las aplicaciones del celular que están vinculadas con multimedia, si bien tienen una preferencia por encima del 61 por ciento de los encuestados, existe también un 30 por ciento de usuarios que las considera poco importantes.
Esto quiere decir que los accesorios del teléfono como megapíxeles en la cámara, calidad en sonido, entre otros detalles, no tan relevantes como el acceso a internet.
USO DE SMS’S La encuesta también permitió develar que existe alto contraste entre las cifras que otorgan importancia al uso del teléfono para realizar llamadas (95 por ciento ), respecto al uso del mismo para enviar mensajería de texto (69 por ciento ), siendo que dichos servicios provienen de los proveedores de telefonía móvil.
Este factor está dado por el fenómeno “Whatsapp”, ya que la mensajería es mucho más eficiente a través de esta aplicación de acceso gratuito que mediante los sms’s con costos individuales.
Esta preferencia es transversal en los grupos de edad.
El “phubbing” como fenómeno de uso de teléfono móvil
Marcelo Durán V.
Consultor en Tecnologías de la Comunicación
Twitter/Facebook: @bithumano
Si usted es de esas personas que cuando está en una reunión con una o más personas, pone más atención al teléfono celular que a sus interlocutores, usted ha incurrido en el "phubbing", que se define como la práctica de preferir mirar la diminuta pantalla del smartphone para tuitear, actualizar Facebook, subir una foto a Instagram, mandar un Whatsapp, pedir vidas en Candy Crush o lo que sea que implique la elección del aparato por sobre las personas con las que se está.
Algunos especialistas consideran que esto significa un riesgo pues implica el deterioro de las relaciones personales, tal y como las conocemos.
Si bien es cierto que todos estamos de acuerdo con que los tiempos cambian, hemos llegado a extremos donde dejamos de interactuar con los asistentes a una reunión, para que al final, cuando se llega a casa, leamos un tuit del tipo: “me encanto verte”, cuando apenas se cruzó palabra con esa persona y no fue capaz de decírtelo en vivo y en directo.
El phubbing, puede suceder en todos lados: restaurantes, bares, parques, cines, teatros, conciertos, en la playa, de shopping, en bodas, con amigos, la pareja, y hasta en velorios e iglesias.
Pasa entre personas comunes y corrientes y también sucede entre famosos.
En ese sentido, ya existen iniciativas que pretenden erradicar o al menos disminuir el phubbig, considerándola como de mala educación, es así que viendo la situación, un chico australiano de 23 años, llamado Alex Haig creó el sitio “Stop Phubbing” para combatirlo.
De hecho fue él mismo quien lo bautizó.
El sitio es muy divertido, armado como una infografía, con datos, tips, y propuestas sobre el “phubbing”.
También se pueden encontrar y descargar pósters para que los dueños de locales los impriman y los peguen en sus establecimientos, así como un formato de carta para enviar al amigo y hasta tarjetas recortables para poner en las bodas. Una derivación de estas propuestas es el llamado “The phone stack”, un juego que consiste en apilar boca abajo los teléfonos celulares de todos los comensales al terminar de pedir la comida.
La mecánica es simple, el teléfono no puede tocarse hasta que terminé la comida.
El que lo haga, pagará la cuenta.
Este es un fenómeno que evidentemente de acceso a las nuevas tecnologías en nuestro país y en nuestra ciudad y que en algún momento, así como muchos bares y restaurantes ofrecen conexión WIFI, otros optarán por colocar letreros a la entrada donde se prohíba el uso del móvil.
Albert Einstein ya decía que "teme el día en que la tecnología sobrepase nuestra humanidad”. Y puede que estemos viviendo esos días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario