Pese al registro de celulares desde 2009, entre el año 2010 a 2012, el robo y extravío de teléfonos celulares se incrementó en 300 por ciento . Así lo revelan datos brindados por la Autoridad de Fiscalización y Regulación de Telecomunicaciones y Transportes (ATT) a la revista Oxígeno.
Las cifras muestran que la evolución de la “lista negra subió de 127.934 (2010) a 449.767 (2012). El total de terminales móviles registrados hasta 2012 llegó a 13.892.460 y se tenían 9.493.623 líneas activas.
“Según la normativa vigente, los celulares que están en la lista negra no pueden ser activados ni funcionar en ninguno de los operadores móviles bolivianos”, detalla la información de la ATT.
A finales de 2009, el Gobierno Nacional promulgo el Decreto Supremo 353, que “establece mecanismos para el control de la comercialización y activación de celulares robados o extraviados”.
En esa ocasión, todos los usuarios debieron registrar el IMEI (Identidad Internacional del Equipo Móvil, por sus siglas en inglés), para evitar que esos terminales sean utilizados por otras personas. Pero actualmente se crearon mecanismos como el “flasheo”, que permite reutilizar celulares robados o extraviados.
Esto derivó en que hasta la fecha, la devolución de telefónos celulares a sus dueños originales fue casi nula, pues Tigo no hizo devoluciones, Viva sólo hizo tres y Entel no brindó los datos requeridos.
Más datos e información sobre este tema pueden ser encontrados en el reportaje que desarrolló la revista Oxígeno, que ya circula en todo el país a un precio de 20 bolivianos.
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